miércoles, 30 de julio de 2008

Las Abuela tienen dos nietos más

La Asociación Abuelas de Plaza de Mayo identificó dos nuevos hijos de desaparecidos durante la última dictadura militar, llevando a 92 el número de nietos restituidos por la entidad. Se trata de la hija de María Teresa Trotta y Roberto Castelli, ambos desaparecidos en distintos operativos el 28 de febrero de 1977, y del hijo de María Lourdes Martínez Aranda y Francisco Goya, secuestrados entre abril y julio de 1980.
Durante la conferencia de prensa, no se dio a conocer el nombre de la hija de Trotta y Castelli, en tanto que el hijo de Aranda y Goya se llama Jorge Guillermo, nombre de nacimiento.
La restitución de la identidad de estos dos jóvenes fue confirmada esta tarde por las Abuelas en una conferencia de prensa, desarrollada en la sede de la entidad, en Virrey Ceballos al 500, que contó con la presencia de Verónica -hermana de la nieta recuperada- y el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde.
La hija de María Teresa Trotta y Roberto Castelli -ambos militantes montoneros- quien nació en el cautiverio de su madre a fines de abril o principios de mayo de 1977, recuperó su identidad el pasado viernes 25 de julio, tras haber sido informada que los estudios de ADN arrojaron una inclusión en la familia Trotta-Castelli de un 99,99%. En tanto, el hijo de Lourdes Martínez Aranda y Francisco Goya, quien desapareció junto a sus padres, supo de su verdadera identidad el último martes 29 de julio, cuando el juez Federal Ariel Lijo, le informó que los resultados de los estudios de ADN, señalaron una compatibilidad con su familia biológica de un 99,99%
"La Petisa" o "Tere", como la llamaban sus amigos a María Teresa Trotta, y "Beto" o "Cabezón", como le decían a Roberto Castelli, militaban en la organización Montoneros y fueron secuestrados el 28 de febrero de 1977, en San Antonio de Padua y
Merlo, respectivamente, según informaron las Abuelas. En el momento de su desaparición María Teresa se encontraba embarazada de seis meses y medio.
Según testimonios de sobrevivientes del terrorismo de Estado la pareja estuvo alojada en los centros clandestinos de detención "Sheraton" y "El Vesubio".
El rastro de su hija se perdió cuando "La Petisa" fue llevada al sector de epidemiología del Hospital Militar de Campo de Mayo, donde dio a luz. Desde ese mismo momento, sus familiares junto a Abuelas comenzaron la búsqueda, denunciando en 1983 su desaparición en la justicia. Tras 25 años, el viernes pasado, su hermana Verónica-militante de H.I.J.O.S y Abuelas-, y el resto de sus familiares supieron que la hija del matrimonio Trotta-Castelli fue entregada en adopción a través del Movimiento Familiar Cristiano, organización que, según datos recogidos por las Abuelas, durante la dictadura "entregaba niños en adopción sin investigar el paradero de su familia". Durante la conferencia de prensa, Verónica, visiblemente
emocionada, dijo sentir "una sensación similar a la que sentí en el momento que nació mi hijo". "Es el día más pleno de mi vida, dediqué mi vida para esto, es
lo que más quería en el mundo", agregó entre sollozos. Tras negarse a dar detalles sobre la nieta recuperada y la posibilidad de un próximo encuentro con ella, Verónica envió un mensaje a su hermana.
"Quiero que sepa que acá hay una familia que la está esperando" dijo, no si antes aclarar: "Sabemos entender sus tiempos y sabemos respetarlos".
El chaqueño Francisco "El Gordo" Goya fue militante en el Movimiento Nacionalista Tacuara, en la Juventud Peronista y en la organización Montoneros.
Con su primera esposa tuvo dos hijos: Juan Manuel y Emilio ,hoy militantes de la agrupación Hijos-Chaco. Durante su exilio en México, el "Gordo" conoció a su segunda
mujer, María Lourdes "Lupita" Martínez Aranda, quien militaba en el Partido Comunista de México. En marzo de 1979 la pareja se fue a España y el 31 de julio
del mismo año nació su hijo, Jorge Guillermo. Lourdes y Francisco regresaron al país en el marco de la denominada Contraofensiva y fueron secuestrados entre abril y
julio de 1980 en Mendoza. Según algunos testimonios, ambos permanecieron detenidos en el centro clandestino "Cuevas". El hijo del matrimonio Goya-Martínez fue recuperado por las Abuelas a partir del dato aportado por un arrepentido que aceleró
la investigación.
"Esto fue posible gracias a la lucha sostenida durante estos más de 30 años", dijo una Carlotto, quien se mostró feliz por la recuperación de ya 92 nietos de desaparecidos.
"Abuelas cumplió", agregó la dirigente y aclaró que "ahora queda en las familias el camino del reencuentro; este es un camino largo y hay que respetarlo".
Por su parte, Duhalde, quien aseguró tener un vínculo muy personal con los hermanos de los nietos recuperados, se mostró "muy feliz" por la restitución de la identidad de los dos jóvenes, Duhalde agradeció a la Abuelas por la "obstinada búsqueda",
que llevan adelante, al tiempo que ratificó el apoyo del Estado a la entidad por que "estoy seguro que este goteo permanente en la búsqueda de la verdad, la justicia y la memoria va a seguir dando resultados". (Télam)

jueves, 23 de agosto de 2007

Repudio (cont)

Teniendo subordinadas a sus órdenes al resto de las Fuerzas de Seguridad tanto provinciales como nacionales: Policía Provincial y Federal, Servicio Penitenciario y Gendarmería Nacional, se ejecutó una secuencia de delitos absolutamente planeada que consistió en el secuestro, privación ilegítima de la libertad, tortura y posterior asesinato de cientos de personas. Así es como Tucumán tuvo el primer Centro Clandestino de Detención del país: “La Escuelita de Famaillá” que funcionó en la ciudad Famaillá, y otros que se fueron habilitando en diferentes partes de la provincia: Jefatura de Policía, Base de Santa Lucía, Ingenio La Fronterita, Ex Ingenio Lules, Arsenal Miguel Azcuénaga, etc. La existencia de estos lugares, así como la comisión de estos delitos, fue declarado probado por la Cámara Federal de Buenos Aires en la condena a las Juntas Militares.

Los principales responsables de la comisión de estos Crímenes de Lesa Humanidad fueron Acdel E. Vilas en primer lugar y Antonio Domingo Bussi, en su carácter de sucesivos jefes a cargo de dicho operativo.

En este contexto, es totalmente falaz y pretende confundir a la opinión pública que quienes hubieren estado en las filas del Ejército, ya sea voluntariamente o por encontrarse prestando el servicio militar obligatorio, durante el periodo comprendido entre febrero de 1975 y marzo de 1976, se llamen a sí mismos “ex combatientes”. El Plan Sistemático de Violaciones a los Derecho Humanos perpetrado en este periodo y en la posterior Dictadura Militar (1976- 1983), no constituyó de ninguna manera una guerra, sino un sistema perfectamente elaborado de comisión de delitos, y fue la excusa para iniciar el aniquilamiento de una parte sustancial de la población argentina, que significó la comisión del Delito de Genocidio.

En un momento en que el Gobierno Nacional proclama a todas voces su política de Derechos Humanos y con un doble discurso asegura que está dispuesto a reparar a las víctimas del terrorismo de estado con la condena a los responsables de los delitos de lesa humanidad mientras al mismo tiempo reprime y criminaliza la protesta social.

El gobernador de nuestra provincia José Alperovich sigue siendo coherente con su política represiva dándole amparo entre sus filas a quienes directa o indirectamente reivindican el Terrorismo de Estado y estos crímenes de lesa humanidad. ¿Como es posible que mientras se proclama como política de estado el respeto a los Derechos Humanos y el enjuiciamiento y condena al Terrorismo de Estado den cobijo en los acoples eleccionarios a quienes en realidad deberían brindar a la justicia testimonio de lo que presenciaron y actuaron durante la vigencia de tan aberrantes crímenes?

En la provincia se hace nuevamente presente la represión de las legítimas protestas de jubilados y organizaciones sociales, prohibición a los vendedores ambulantes y artistas callejeros a ejercer su legítimo derecho a trabajar en la calle…ahora hace alianzas políticas con quienes ayer formaron parte del aparato Terrorista del Estado y hoy, después de más de 30 años, siguen levantando consignas reivindicativas de sus delitos.

NO OLVIDAMOS
NO PERDONAMOS
NO NOS RECONCILIAMOS

30.000 COMPAÑEROS DESAPARECIDOS, PRESENTES!!!
APARICIÓN CON VIDA YA DE JULIO LOPEZ.

jueves, 26 de julio de 2007